jueves, 14 de febrero de 2008

El amor es...

Hace tiempo que tomó café. Esto no es algo como para que lo publique un diario como exclusiva mundial. No es para tanto. Pero he observado que si te lo tomas por ahí te encuentras en los sobrecitos de azúcar frasecitas de lo más curioso. Yo desde luego me quedo con la serie "El amor es..." Cierto es que las encuentro muy desfasadas y como demasiado cursilonas. Y ya es hora de actualizarlas a los tiempos que corren.

La putada de estas frases es que te das cuenta de que están en el sobre cuando has tirado la mitad al abrirlo y no puedes completarla. El amor es... y te quedas ahí o rebuscas en la papelera para conocer el resto. Normalmente son del tipo: El amor es... no tener que decir nunca lo siento. O el amor es... regalarle una rosa al amanecer. Están bien. Pero ahora estas cosas como que han cambiado un pelín.

Ahora se llevarían estas otras:

Amor es... no tirarte por la ventana cuando llevas 3 horas esperando que se termine de arreglar.

Amor es... aguantar una tarde de tiendas con ella tras probarse 1000 vestidos y 300 pares de zapatos que no piensa comprarse nunca.

Amor es... no tomarse un frasco de veneno cuando ella quiere ver Operación Triunfo un día que te apetece salir a cenar fuera.

Amor es... aguantar toda una tarde a un compañero de su trabajo que ella considera majo y que sólo habla de fútbol y de los rollos de la oficina.

Amor es... no envenenar a su madre cuando ha venido para un fin de semana y lleva ya tres meses viviendo con nosotros.

Amor es... no ahorcarte con el cable del teléfono cuando llevas 3 horas llamándola y está hablando con su amiga Ana del vestido que se van a poner el sábado.

Amor es... terminar de escribir este monólogo y que ella no crea que es demasiado machista.

Estas serían las frasecitas para los tíos, que las tías también tendrían las suyas. Deberían venir especificadas.

Para una mujer:

Amor es... aguantarlo toda una tarde y noche porque le ha surgido un problema en el trabajo.

Amor es... no estrangularlo porque se ha olvidado del aniversario, pero ha quedado con una compañera del trabajo porque cumple años.

Amor es... no cabrearse por tener que aprender de memoria nombres como Kluiver, Saviola, Raúl, Karembeu o Roberto Carlos y saber en qué equipo juegan.

Amor es... no hacerle vudú cuando llega a las 4 de la mañana ciego y con manchas de carmín en la camisa y te dice que ha estado trabajando.

Amor es... no odiarlo de por vida cuando se pasa 4 horas diarias chateando por Internet con tías que están a 10.000 kilómetros.

Amor es...no mosquearte cuando descubres que lo que el entiende por una noche de pasión son apenas 5 minutos.

Y desde luego la más importante de todas:

Amor es... no cortársela cada vez que deja la tapa del water abierta.

Y es que a una mujer le puedes hacer cualquier cosa que te perdonará, pero dejarte la tapa del water abierta es un estigma que ella verá grabado en tu frente de por vida. Cada vez que te mire, pensará. Este tío se deja la tapa del water abierta, aunque estés hablando del precio de los tomates o de las próximas elecciones.

En definitiva que hay que actualizarlas cuanto antes.

Francisco José Saavedra

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